Esta calefacción se enciende a la primera y posee un sistema de seguridad que la apaga automáticamente cuando detecta una mala combustión o exceso de CO2. Yo la utilizo con gas butano, aunque se recomienda usar propano. Desde el día 1 la tengo puesta y todavía no he tenido que cambiar la bombona. Lo mejor es ponerla al máximo durante unos minutos para calentar la habitación, y luego bajarla al mínimo para mantener la temperatura.
Me ha encantado todo. Se enciende sin complicaciones y es fácil de transportar. Además, su diseño es muy bonito. Lo más importante es que calienta toda la habitación de inmediato, a pesar de que es grande. Sin embargo, hay un detalle que no me gusta tanto: el cierre de la botella de butano no me parece muy resistente y sobresale de la estufa. Recomiendo esta estufa sin embargo.
Es necesario respetar las especificaciones del fabricante al momento de encender la estufa. Esto ayudará a prender el encendedor y luego el quemador sin problemas. Una vez comprendido el proceso, sera fácil y rápido. El olor a gas es leve, así que hay que asegurarse de ventilar el área y cerrar siempre el interruptor del regulador de la bombona para evitar escapes pequeños.
Estoy muy satisfecho con mi compra, esta estufa calienta mucho, especialmente cuando se llega a la temperatura máxima. Aquellos que dicen que no deberías usar estas estufas debido al peligro que representan, deberían tranquilizarse. Si la dejo funcionando a media potencia desde la mañana hasta la noche, una bombona me dura aproximadamente tres semanas.
La estufa es perfecta para calentar rápidamente una habitación de aproximadamente 30 metros cuadrados, con una consupmición de energía reducida y un tamaño muy compacto y ligero. La desventaja es que solo tiene una puerta de plástico en la parte trasera para cubrir la bombona.