Este termo es muy básico, no cuenta con una regulación digital, solo contiene una rueda de ajuste debajo del mismo. Sin embargo, cumple con su cometido de calentar el agua correctamente.
El diseño es muy minimalista, equipado únicamente con una luz de encendido y una aguja que indica los tres estados. La instalación es sencilla, se debe instalar correctamente, abrir el agua y esperar unos minutos para que el termo se llene antes de encenderlo. Nunca hay que encenderlo antes de llenarlo.
Viene con dos tornillos para fijarlo a la pared en lugar de los cuatro que teníamos antes, lo que facilita el proceso de instalación. Calienta el agua rápidamente, al cabo de una hora ya podemos disfrutar de ella caliente. El único inconveniente es que hay algunas protuberancias pequeñas en la parte superior.
Este termo es una solución básica sin controles digitales. En la parte inferior hay una ruleta para controlar la temperatura del agua. La forma de ajustarla es "meter la mano bajo el grifo y probar con la ruleta hasta encontrar la temperatura deseada".
El envío llegó a su destino en el tiempo acordado y en óptimas condiciones. Después de 15 días, el termo continúa funcionando sin problemas. La instalación resulta sencilla, aunque es recomendable contar con la ayuda de alguien más para colocarlo en la pared.