Comentarios de usuarios españoles para ayudarte a comprar lijadoras orbitales de esta marca
Makita siempre cumple con las expectativas, ofreciendo una lijadora compacta y simple de operar. La calidad del material y el acabado son excelentes, con empuñaduras de goma para un agarre cómodo y seguro. El equilibrio es bueno, aunque la aspiración integrada no es tan fuerte como se desearía. En general, se trata de una buena compra.
¡Qué diferencia hizo la lijadora de Makita! Terminó rápidamente el trabajo de afinado de nuestra cubierta de madera de 14' x 35', que llevaba 27 años sin ser refinada. Primero usó una lijadora de piso para eliminar la capa inicial, pero necesitaba entrar en los rincones y grietas. Utilizó una lijadora de palma, pero tardaba mucho. Por suerte, decidió comprar una lijadora más potente de Makita, que mereció cada centavo.
Esta herramienta hizo un trabajo maravilloso dejando la cubierta como nueva, lo cual le habría ahorrado una semana de esfuerzo si la hubiera comprado desde el principio.
Compré esta herramienta y me resultó de baja calidad. Después de unas pocas horas de uso, resultó dañada. El vendedor me dijo que estaba usándolo de manera incorrecta, ¡por favor! Tengo 30 años de experiencia como carpintero y nunca me había pasado algo así. Tengo una lijadora Hitachi similar que lleva 5 años y sigue funcionando a la perfección. Por esta razón, no recomiendo adquirir esta lijadora de Makita.
La calidad de este producto es excelente; su funcionamiento es estable y se caracteriza por su bajo nivel de vibración. Sin embargo, es complicado conseguir refacciones y accesorios para este producto en México, lo que lo hace más costoso.
Esta lijadora es muy poderosa y cuenta con ajustes de velocidad. La caja resistente para su transporte es una necesidad para mantener el producto a salvo. Ya que no es un artículo barato, se recomienda comprar una placa perforada para adaptar las hojas de lija. Después de buscar, encontré una placa de Makita para esta lijadora, pero las perforaciones eran demasiado pequeñas, un gran error de los ingenieros de la marca.