Encontré una jarra pequeña perfecta para probar café helado. Me ha resultado tan útil que necesito una más grande, ya que mis familiares y amigos disfrutan del café tan a menudo que a veces no hay nada para mí.
Me agrada mucho que no haya restos en el café. Mi antigua cafetera solía tener café molido que salía por el colador de malla. Esta jarra para infusión fría está completamente libre de restos (se usó el mismo café molido, con un molido grueso).
Esta jarra ha resultado ser la perfecta para mis necesidades. Tiene una forma ergonómica que me resulta cómoda para manejar, además cuenta con un parachoques protector para evitar accidentes por mi torpeza. El modelo anterior era demasiado alto para mi refrigerador y la encimera no resistió mucho el impacto de los accidentes provocados por mi desatención. Estoy muy contento con la adquisición de esta jarra.
¡No puedo creer que haya tardado tanto tiempo en darme cuenta de la existencia de mi cafetera de hielo! En temporadas cálidas, siempre he bebido café helado, pero hasta ahora me veía preparando una taza de café caliente y dejándola enfriar en el refrigerador, lo que resultaba en un sabor quemado. Sin embargo, ahora que tengo esta cafetera de hielo, mis bebidas se preparan recién hechas e incluso me ahorran el sabor a quemado. ¡Estoy encantado!
Intenté preparar mi primer café frío helado con mi cafetera. Me fue fácil seguir las instrucciones y lo preparé durante 16 horas. El sabor resultó muy agradable. Me enteré de que cuando preparas tu café debes usar la mitad de tu taza con la infusión fría, agregar agua fría y luego leche o crema. Esta máquina prepara un concentrado, por lo que es necesario agregar un poco de agua a la taza, de lo contrario el café quedará demasiado fuerte. Busqué información sobre cómo hacer café helado frío en línea para obtener más consejos útiles. En conclusión, esta pequeña cafetera es suficiente para hacer unas cuantas tazas de café.