Una vez encendido, notarás el aire caliente en unos pocos segundos. Se trata de un dispositivo consumidor de energía, con un máximo de 1.500W, pero en unos cortos 10 minutos tendrás tu cuarto de baño (que mide 6 m2) cálido.
Con su tamaño y potencia, este aparato es perfecto para calentar el baño antes de tomar una ducha durante los fríos inviernos. Esto nos permite ahorrar energía al no tener que poner la calefacción sólo para el aseo. Además, su accionado es muy rápido, pudiendo calentar una habitación pequeña en un corto periodo de tiempo.
Este producto cuenta con un selector rotativo ubicado en la parte superior que permite seleccionar entre ventilación, calor medio o calor máximo, además, también hay otro selector que le permite optar por dos niveles de potencia de calor, 750W y 1500W.
El ventilador hace cierto ruido, pero no es demasiado alto ni desagradable. Al apagarlo, es importante tener precaución y esperar a que se enfríe, pues la rejilla blanca se calienta considerablemente. Por tal motivo, es recomendable evitar una posible quemadura.
Los paneles de la parte frontal y trasera no se pueden desmontar, así que para limpiarlo tendremos que usar aire comprimido o un cepillo fino. Hay un LED rojo que nos indica cuando el dispositivo está en uso. Después de usarlo, hay que esperar que se enfríe un poco antes de guardarlo, ya que el calefactor suele estar un poco caliente. Algunos modelos tienen un sistema que mantiene el ventilador encendido durante unos segundos para conseguir que se enfríe más rápido.